Río rápido

Al más puro estilo del descenso de las bravas aguas de algunos ríos, esta aventura familiar, incluso infantil, y colectiva, de la que puede disfrutar un numeroso grupo de personas al mismo tiempo, es como una montaña rusa de sensaciones, en la que se pasa de una repentina subida de adrenalina a un suave descanso bajo el sol.

Montados en grandes flotadores* emulando a las balsas, canoas o kayaks en las que se sigue la corriente de los ríos en la práctica real del rafting, los aventureros que se animen a montarse en Río Rápido pueden sacar a flote su espíritu más competitivo realizando carreras a toda velocidad por su sinuoso trayecto lleno de sorpresas a lo largo del bullicioso curso del agua.

Los momentos álgidos de la diversión se viven en las curvas y las rápidas pendientes de este río para llegar después a remansos de agua en los que tumbarse al sol, mientras se dejan a remojo los pies y las manos y se relaja el cuerpo antes de prepararse de nuevo para afrontar el siguiente rápido.

Se trata de una refrescante e interactiva atracción acuática a lo largo de toboganes de media circunferencia en los que el reto es pasar de una balsa a otra impulsado por cascadas o cruzando remolinos acuáticos, por ejemplo, sin caerte del flotador. Puedes afrontar esta experiencia solo o compartiendo la embarcación con un acompañante.

Es el tobogán mas largo del Aquopolis Villanueva de la Cañada, con más de 300 metros de recorrido imprevisible por la ladera de la montaña y rodeado de naturaleza que te harán sentir como si descendieses por el cauce de un río.

*Tipos de flotador:

• Flotador simple: para personas a partir de los 120 cm de altura.
• Flotador doble: para personas entre 90 y 120 cm de altura. La persona de menor peso irá en la parte delantera.

Las personas que no superen los 120 cm de altura deberán ir con un adulto en el mismo flotador.

La profundidad de la piscina es de 1,20 metros.